jueves, 5 de mayo de 2011

No te vayas.

Caminar cerca a un lago

con brisa fresca...

El sonar de las hojas que caen...

de su choque con el suelo...

Un sol de verano a las cinco de la tarde,

una infancia atesorada,

recuerdo de chocolate y galletas,

preparado por la abuelita Angélica...

Sonar del batir de alas

de ángeles que se niegan a partir
....

Viento fresco

sueños nuevos

¿A dónde te has ido?

¿Por qué hoy ya no estás conmigo?

¡Inocencia!

¡no te vayas!

¡quédate siempre conmigo!

Finge que nunca te fuiste

y decídete a acompañarme.

Con eso,

si pronto muero,

recibiré con ojos abiertos

a un ángel más.

No al ángel que apagará la luz,

que atará mis pasos

y sellará mi historia

con un frío y eterno abrazo

¡Inocencia!

¡No te vayas!

¡quédate siempre conmigo!

1 comentario: