miércoles, 29 de abril de 2020

¡Buenos días!

Hoy es un buen día para vomitar las mariposas que flotan muertas
desde hace tiempo
en la barriga de una princesa virgen recién casada


Hoy es un buen día para cerrar la ventana por la que el último rayo cenizo de luz solar entraba
y abrir las puertas a la oscuridad que vive en el hueco
donde antes moraba un corazón


Hoy es un buen día para dejar caer los pocillos de porcelana de una matrona
acariciarlos
rodearlos con la palma de la mano
servir un sorbo de agua
de té
de chocolate frío con queso derretido
y después de libar el trago
estrellarlos contra una pared
recién pintada de blanco


Hoy es un buen día para arrancar las cintas de audio que se enredan en la cabeza
arrebatárselas al recuerdo
hacerlas barco errante en un lago de alcohol
y mostrarle el camino
con un fósforo encendido


Hoy es un buen día para apagar las luces
verse al espejo, escupir el reflejo
para recordar que la vida se limita
a los doce puntos tatuados en el reloj,
que el movimiento del tiempo
no es más que la marcha suicida
que conduce al fin.