lunes, 19 de septiembre de 2022

Las begonias florecen en el patio

 

A veces, cuando llueve

Resuena en el corazón el eco de tus pasos

De ese domingo por la tarde

Del día que te pedí que no te fueras 


A veces, cuando llueve

Silba tu voz con la del viento

Y acaricia la copa de los eucaliptos que sembraste un par de días después de mi nacimiento


A veces, cuando llueve 

Se revuelve la tierra que quedó en el fondo del vaso 

Miro hacia los lados 

Y el vacío que tirita cerca de las ventanas

Me grita entre dientes que ya no quieres volver 


A veces, cuando llueve

Te conviertes en canción

La acuarela de tus ojos se derrite 

Y del vacío que cargo en el pecho se escucha el eco 

Palpita 

          Revuela 

Lo escucho con paciencia 

Mordiéndome la lengua

Cuento las gotas suicidas que se estrellan contra los techos 

Con la resignación de una vela en medio del invierno

Hasta quedarme dormida